Esta tarde me ha llamado un amigo pidiéndome un favor, que si una fuente quemada, que si vete tú que yo me mancho, en fin, que al final mi amigo quería un precio por el servicio. Y yo no sabía qué decirle.
Porque una cosa es que te toque la del pringao how-to y otra que se ofrezcan a pagar y no sepas qué decir.
Y la verdad, hasta ahora no había pensado detenidamente en el cálculo real de los costes, y por real me refiero a algo más que hayar el precio por kilómetro o dar un precio /hora aceptable.