En el bar de siempre se les ha muerto el ordenador, con él se ha ido el programa de gestión de tpv que les vendieron hace unos años, una solución privativa que les ofrecía una calculadora táctil por una cantidad sonrojante.
Que a mí no me importa el modelo de negocio de otros proveedores, a mí me importa la estabilidad del conjunto a futuro y que no me molesten mientras me tomo una cerveza.
Así que tras un brainstorming con el dueño y un par de búsquedas en google he encontrado Unicenta POS, un punto de venta opensource, muy visual, con una curva de aprendizaje entre poca y muy poca y con las necesidades básicas para cualquier empresa de retail.